A ciertas sensaciones, es muy difícil ponerle palabras

Lo bueno que tiene Madrid es que cuando menos te lo esperas te sigue sorprendiendo. Aquí hay de todo, para todos, y a cualquier hora. Llevo un tiempo dándole vueltas... ¿Qué tiene el barrio de Malasaña para reunir tantas y tan especiales tiendas, cafeterías...? Perderme por sus calles y descubrir la maravillosa librería "Tipos Infames" , me lo hizo recordar.

se trata de un precioso espacio en la calle San Joaquín 3, donde puedes comprar un libro de su cuidada selección, y a la vez, sentarte en una de sus mesitas para degustarlo con café, una de sus cervezas artesanas, o un vinito de autor. La verdad es que me encanta este concepto de abrirse a la cultura rompiendo moldes. Y lo mejor de todo, es que además su planta baja sirve como sala de exposiciones, se hacen coloquios, ¡e incluso talleres de escritura y cursos de punto!

Cuando me enteré de que uno de mis artistas favoritos, Santiago Auserón, presentaría su poemario de canciones allí, no pudo parecerme más increíble la noticia. Es muy probable que no haya otra persona en el planeta que me haya marcado tanto como él, al igual que no creo que exista otro hombre, que no satisfecho con haber liderado un grupo de Rock'n'Roll, se convierta en un verdadero sabio y concilie como nadie estos dos aspectos tan aparentemente dispares. La verdad es que fue un honor conocerle. Poca gente me resulta tan hipnótica hablando.

Después de callejear y descubrir cosas y sitios que no sabía que existían, nos fuimos a merendar al Café Manuela, mi favorito. Me encuentro tan agusto y tan en paz allí, que siempre acabo haciendo un alto en el camino. Sus zumos naturales me enloquecen, el de manzana con lima especialmente! Laura y yo aprovechamos para contarnos todas las paranoias que pasaban por nuestras cabezas, y leer las primeras hojas al azar del libro.

Santiago dice que todo el que tenga en casa este ejemplar, escoja aleatoriamente una página y la lea. Si te gusta lo que lees, el tiempo ya se encargará de que leas el resto. Qué mundillo interior tiene este hombre, que todo lo que toca lo convierte en genialidad.

Resulta que ya habíamos dado por finalizada la tarde, y "qué cosas tiene la vida" que en la misma calle San Joaquín me topé de frente con Lolita's closet, una tienda de ropa y accesorios vintage prácticamente recién inaugurada, y con una infinita colección de preciosidades. Hace tiempo que llevaba buscando un collar con una mariposa sujeta por lo extremos de las alas. Se lo vi a una actriz en una serie y me encantó. Ya casi iba a salir cuando... allí lo encontré! Fue igual que si me tocara un premio. Iba a dar un beso a la diseñadora (Beatriz Palacios) por ello, pero no estaba. jajaja

me encantan estas casualidades de la vida que convierten las cosas cotidianas en todo un acontecimiento ♥